Asistimos el pasado día 10 de diciembre de 2017, en la Base Aérea de Zaragoza, a la celebración de la festividad de Nuestra Señora Virgen de Loreto, Patrona de las Fuerzas Aéreas Españolas.
El acto central tuvo lugar a partir de las 12.00 horas en uno de los impresionantes hangares del ALA 31, para el nuevo avión A-400. Estuvo presidido por el Jefe del Mando Aéreo de Combate, Teniente General José María Salom, a quien acompañaron el General de División Julián Roldán Martínez, Jefe de Movilidad Aérea, y el General de Brigada Antonio Francisco Nebot Más, Jefe de la Base Aérea de Zaragoza.
Asistieron igualmente las siguientes autoridades militares: Comandante Militar de Zaragoza y Teruel, GB. Luis Lanchares Dávila, Director de la Academia de Logística de Calatayud, GB. Juan Ramón Sabaté Aragonés, Jefe de la Brigada Aragón I, GB. José Luis Sánchez Martínez-Falero, Jefe de la 8ª Zona de la Guardia Civil, GB. Carlos Crespo Romero, Jefe de la Brigada Logística, GB. Óscar Lamsfus Galguera, y el Delegado de Defensa en Aragón, Coronel Félix Allo Flores.
Otros militares de alta graduación asistentes al acto fueron el General de División (R) Juan Pinto Sánchez-Mayoral y el General de Brigada (R), Andrés Chapa Huidobro.
Las principales autoridades civiles que asistieron al acto fueron las siguientes: Fiscal Superior de Aragón, José María Rivera Hernández, Subdelegado del Gobierno en Zaragoza, Ángel Val Pradilla, Jefe Superior de Policía en Aragón, José Ángel González Jiménez, Vicepresidente de la Diputación Provincial de Zaragoza, Martín Llanas Gaspar, Comisario Jefe Provincial de Zaragoza, Francisco Jesús Navarro Francia, y el Deán del Cabildo Metropolitano de Zaragoza, Luis Antonio Gracia Lagarda.
Fue un acto más breve de lo habitual por cuanto alguna de las ceremonias que normalmente van implícitas en el mismo, como es la imposición de condecoraciones, se había realizado con anterioridad.
El Jefe de la Base Aérea de Zaragoza, GB. Antonio Francisco Nebot Más pronunció una alocución en la que, después de un capítulo de salutaciones y agradecimientos dijo, lo siguiente:
“En primer lugar quiero felicitar a la gran familia que formamos el Ejército del Aire, en el día de nuestra Patrona y hacer una breve reflexión sobre todo aquello que nos une e identifica como miembros de una misma institución, el Ejército del Aire. A todos los aviadores del Ejército del Aire nos une nuestros valores militares, nuestro espíritu aeronáutico y nuestras tradiciones“.
“Hoy, 10 de diciembre, es el día más señalado en nuestro calendario. Nuestro esfuerzo, entrega y profesionalidad, permiten que el Ejército del Aire pueda cumplir la misión que tiene encomendada, de servicio a España, los 365 días del año, vigilando y controlando de manera permanente el espacio aéreo español, contribuyendo a la acción aérea del Estado y participando en la seguridad y defensa de España y de nuestros países aliados, más allá de nuestras fronteras.
Podemos sentirnos orgullosos de nuestro trabajo, vocación y compromiso“.
Señaló después que el desarrollo de la aviación ha estado precedido de siglos de sueño, estudio, especulación y experimentación. El deseo de volar ha acompañado al hombre prácticamente desde sus orígenes. Los comienzos de la aviación no fueron fáciles y muchísimo menos, seguros, en la mayoría de los casos fueron francamente peligrosos. A principios del siglo XX las primeras aeronaves eran frágiles máquinas hechas de madera, tela y cables, propulsadas por rudimentarias hélices y pequeños motores.
Estaba claro que para pilotar esos aviones había que contar con la mayor protección posible, pero sobre todo con la protección divina. Por todo ello, y atendiendo a la solicitud de numerosos fieles y algunos organismos relacionados con la aviación, el Papa Benedicto XV proclamó a Nuestra Señora de Loreto , Patrona de la aviación mundial en marzo del año 1920, y en diciembre de ese mismo año, S.M. el Rey Alfonso XIII puso a la aeronáutica militar española bajo el patronazgo de
la Virgen de Loreto.
El 7 de octubre de 1939 se creó el Ejército del Aire, basado en el empeño de unos cuantos apasionados en surcar los cielos defendiendo a España, y así lo ha venido haciendo, desde entonces bajo el manto de la Virgen de Loreto.
Años después, la noche del 21 de octubre de 1951 un avión Junkers 52 del Ejército del Aire tuvo una seria avería a bordo quedándose sin equipo de navegación y sin comunicaciones. El cielo estaba cubierto de nubes y tampoco podían reconocer visualmente donde se encontraban. Tras varias horas en el aire pudieron encontrar un hueco entre las nubes y el comandante de la aeronave hizo saltar a la tripulación en paracaídas y permaneció dando vueltas sobre aquel lugar. Al llegar al suelo, y ayudados por los lugareños, la tripulación consiguió hacer varios fuegos y señalizar un campo para que el avión pudiera aterrizar sin daños, salvándose los siete tripulantes del Junkers.
La tripulación atribuyó aquel milagroso aterrizaje a la intercesión y protección de la Virgen de Loreto. Esto ocurrió en Aragón, cerca de Teruel, y prueba de ello es la placa conmemorativa que se encuentra en la ermita de Nuestra Señora de Loreto, en el pueblo de Cella, que fue ofrendada por estos siete aviadores.
“En el Ejército del Aire trabajamos, día a día para salvaguardar los valores esenciales de la sociedad española y garantizar los derechos y libertades de nuestros ciudadanos, el respeto a la seguridad de las personas y de los principios democráticos recogidos en la Constitución.
Nuestra principal responsabilidad es encontrarnos en todo momento en disposición de emplear las distintas capacidades del poder aéreo en defensa de los intereses de España y de los españoles“.
“No vamos a enumerar ahora la gran cantidad de actividades realizadas por las distintas Unidades del Ejército del Aire en Zaragoza durante el último año. Simplemente permítanme destacar dos grandes eventos que han tenido lugar en el año 2017. La visita de la Ministra de Defensa a la Base Aérea de Zaragoza, que fue la primera Unidad del Ejército del Aire que visitó la Ministra desde su nombramiento, con la satisfacción, orgullo y responsabilidad que ello conlleva para todos nosotros. En segundo lugar la inauguración del Centro Europeo de transporte Táctico en la Base Aérea de Zaragoza, responsable del Entrenamiento Táctico Avanzado de la Aviación Militar de transporte en Europa“.
Con relación al trabajo cotidiano de todas Unidades del EA en Zaragoza, quiso transmitirles su enhorabuena por el trabajo bien hecho y por tener la satisfacción del deber cumplido.
También quiso felicitar a todos los compañeros que estaban de servicio velando por nuestra seguridad y la de nuestro espacio aéreo, garantizando nuestra disponibilidad permanente.
Igualmente felicitó a quienes estaban en este día desplegados en Yibuti, Gabón, Senegal, Irak, Afganistán e Italia, haciendo posible que la presencia y labor del Ejército del Aire en esas tierras goce de reconocido y merecido prestigio por parte de nuestros aliados y amigos.
En este día tan especial para los aviadores quiso que tuviéramos presentes a todos los miembros del Ejército del Aire que ya no están entre nosotros, especialmente a los que dieron su vida en acto de servicio cumpliendo con su deber, rindiéndoles los honores que se merecen para que no se apague nunca su llama y los tengamos siempre en el recuerdo.
También quiso transmitir a los familiares de todos su más cordial felicitación, agradeciéndoles su apoyo constante, incondicional y desinteresado, que les permite seguir cumpliendo su misión con entrega y entusiasmo.
Para concluir dijo lo siguiente: “solo nos resta pedir a la Virgen de Loreto que nos proteja a todos con su manto y como dice nuestra salve aviadora, si nuestras alas se quiebran al final de nuestro vuelo, tus brazos con amor se abran. Finalmente deseo a todos una muy feliz patrona y les invito, con la gloria de ser español, a gritar conmigo”: ¡VIVA ESPAÑA! ¡VIVA EL REY! ¡VIVA EL EJÉRCITO DEL AIRE!
Seguidamente se entonó el Himno del Ejército del Aire y a continuación tuvo lugar la siempre emotiva ceremonia de homenaje a los soldados de todos los tiempos, encuadrados en los ejércitos de España, que un día lucharon con valor, sirvieron con lealtad y murieron con honor.
Se dio lectura del bello soneto de rigor en esta ceremonia, que se inicia con las siguientes palabras: Lo demandó el honor y obedecieron, lo requirió el deber y lo acataron, con su sangre…
Se cantó la parte central de la oración cristiana “la muerte no es el final”. Guiones y banderines avanzaron a paso lento hacia el monolito de homenaje que nos recuerda a los que, en paz o en guerra, dieron su vida por España. Se depositó una corona de laurel a los pies del monolito, y el R.V. Victor Seoane rezó la siguiente oración: “Que el Señor de la vida y la esperanza, fuente de salvación y paz eterna, les otorgue la vida que no acaba, en feliz recompensa por su entrega. Que así sea“.
Escuchamos luego el toque de oración y, coincidiendo con su último acorde, se disparó una salva de honor de fusilería.
Se procedió a la despedida de la Bandera con los máximos honores militares: arma presentada e Himno nacional.
Finalizado el acto, el Escuadrón de Honores se dirigió al punto de partida para iniciar el posterior desfile terrestre, que tuvo lugar en el exterior, y en el que la formación pasó con gran marcialidad frente a la tribuna de autoridades e invitados. Más arriba, en el espacio aéreo sobre la vertical de la Base, desfilaron varias aeronaves que centraron la atención de todos los presentes.
Posteriormente la Unidad anfitriona ofreció un Vino Español al inicio del cual pronunció unas palabras el Teniente General José María Salom, en las que manifestó su agradecimiento al Jefe de Movilidad Aérea, GD. Julián Roldán Martínez, por haberle cedido la presidencia del acto, y a las autoridades civiles por su presencia en el mismo. Felicitó al General Nebot por la brillante organización del evento, a los miembros del ALA 15, del ALA 31, y al resto de Unidades por el buen trabajo realizado durante todo el año.
Finalizó su intervención con las siguientes palabras:
“Teniendo presentes a los dos pilotos fallecidos este año, Fernando y Borja, y a todos los que están lejos de casa, especialmente a los del ALA 31, manteniendo la seguridad de España, lejos de sus destacamentos, vamos a brindar por el Jefe del Estado, jefe supremo de las Fuerzas Armadas”, ¡POR SU MAJESTAD EL REY!
Después del brindis tuvimos oportunidad de saludar a tres Hijas de la Caridad de San Vicente de Paul, que viven junto a otras compañeras en el Hospital General de la Defensa, y que se hallaban junto a los reverendos,Victor Seoane, capellán castrense de la Base Aérea, con consideración de Comandante, Rodrigo Nieto Díaz, capellán del RPEI12, y Wenceslao Sanz, Vicario del EA (R).
Nos comentaban las hermanas que el acto les había parecido muy bonito y que habían llorado cuando se interpretaron los Himnos del Ejército del Aire y de España. Aquí queda su testimonio.
Desde la Real Hermandad de Veteranos de las Fuerzas Armadas y de la Guardia Civil felicitamos al General Jefe de la Base Aérea de Zaragoza, por la brillante organización del acto y le agradecemos su invitación al mismo.