Segundo Sitio: 21 de diciembre de 1808 al 20 de febrero de 1809
En el edificio Paraninfo de la Universidad de Zaragoza asistimos, el pasado día 27 de septiembre de 2022, a la presentación del libro-cómic ¡ZARAGOZA NO SE RINDE!”. Segundo Sitio: 21 de diciembre de 1808 al 20 de febrero de 1809, obra del autor Javier Rubio.
El acto se desarrolló en el Aula Magna a partir de las 19.00 horas, estando la mesa presidencial compuesta por las siguientes personalidades: Presidente de la Asociación Cultural Los Sitios de Zaragoza, Gonzalo Aguado Aguarón; Presidente de la Asociación Cultural de Recreación Histórica Voluntarios de Aragón, Luis Sorando Muzás; Gerente de Librería Futuro, Alejandro Martínez, y el autor de la obra, Javier Rubio.
Entre el numeroso público asistente pudo verse a relevantes personalidades del mundo académico y a un nutrido grupo de personas ataviadas con vistosos trajes regionales representando al paisanaje de la Zaragoza de principios del siglo XIX.
Los Reales Tercios de España, fundados en 1942 por S.A.R. Don Juan de Borbón y Battenberg, estuvieron representados por Manuel Grao Rivas, Jefe de Relaciones Institucionales del Tercio Norte-Aragón.
Se inició el acto con la intervención del Director de Librería Futuro, Alejandro Martínez, quien recordó que habían pasado ya cinco años desde la presentación, en el mismo lugar, de la primera parte de la obra, titulada ¡ZARAGOZA RESISTE!. Primer Sitio: 15 de junio al 14 de agosto de 1808. Luego dijo lo siguiente: Si el primer libro fue de su agrado, les garantizo que este les va a sorprender por el trabajo que ha realizado el autor. He sido testigo de los cambios que iban surgiendo, y de las modificaciones que se iban realizando.
Así como de las ilustraciones, más complejas, con más realismo y de gran calidad, como luego podrán comprobar. Quiero agradecer a la Universidad de Zaragoza su disposición de esta Aula Magna del Paraninfo, tan importante para la ciudad, donde también se presentó el libro anterior, del Primer Sitio, y con muchos de los presentes, que nos acompañaron hace cinco años.
Intervino a continuación el Presidente de la Asociación Cultural Los Sitios, Gonzalo Aguado, y este es un resumen de lo que dijo: Yo pensaba hoy cuantos buenos momentos he disfrutado a lo largo de mi vida, sobre todo en mi infancia, leyendo tebeos, leyendo cómics. Recuerdo grandes momentos de leer y releer. En aquellos tiempos, cuando nos aburríamos lo que podíamos hacer era ponernos a leer y volver a leer. Hoy en día, creo que, las nuevas generaciones tienen sobredosis de pantallas y con esas pantallas no se aburren, aunque pierdan creatividad. La verdad es que celebro haber podido disfrutar de todo aquello en una época que yo creo fue la época dorada de los tebeos, con Mortadelo y Filemón, Zipi y Zape, incluso aquellos cómics que no eran de mi generación, como Roberto Alcázar y Pedrín o El Guerrero del Antifaz, con los que recuerdo haber disfrutado también, incluso aquellas famosas historietas francobelgas de Asterix y todas las cosas que nos han dado tan buenos momentos.
Todo eso ha penetrado en nosotros y nos ha quedado ese deseo y ese gusto por la novela gráfica, por el libro gráfico, y precisamente es algo que hoy estamos celebrando con esta presentación. Recuerdo que, cuando era pequeño, en 1984 la CAI publicó un libro de Breve historia de Aragón, que no sé cuántas veces lo llegué a leer aquel libro, de dos volúmenes, en el que había unas seis páginas dedicadas a Los Sitios. Desde entonces poco más se ha escrito sobre Los Sitios a nivel de cómic, o muy poco. Aquellas imágenes se me quedaron grabadas para siempre. Eso hace que uno, de forma inconsciente, vaya conociendo la historia y finalmente penetra en nosotros. Es decir, por un lado o por otro, son mensajes que han ido llegando y nos han hecho sentir esa admiración que sentimos por los defensores de Zaragoza.
Por aquellos hombres y mujeres que defendieron nuestra ciudad de aquella manera tan increíble.
Sin duda alguna, el cómic es un entretenimiento, pero es también una forma fantástica de introducir a la gente en la cultura, en el conocimiento de muchos temas y, en concreto, en este tema de Los Sitios. Ojalá tuviéramos más cómics, más gente dispuesta a hacer otras ideas que proyecten el tema de Los Sitios, al que precisamente nuestra asociación da divulgación y ayuda todo lo posible, por cualquier medio, a cualquier persona que intente ayudar para que se conozca mejor la historia de Los Sitios, y sin duda alguna esta es una herramienta súper valiosa.
En el año 2017, Javier presentó el primer libro ¡ZARAGOZA RESISTE!, que tuvo un éxito enorme de ventas, y que además era un regalo fantástico que gustaba a jóvenes y a mayores. Es una de las cosas que a mi me gustó regalar, algo que vas a conservar siempre. Precisamente por aquel éxito y por haber tenido esa iniciativa, se le concedió el Diploma de la Asociación, del mismo año, en este Aula Magna, a Javier Rubio como reconocimiento a su obra. Desde entonces hemos estado todos impacientes, preguntándole cada vez que lo veíamos, ¿cómo va el libro, cuando va a salir?, como si eso se hiciera fácilmente. Me consta todo lo que ha seleccionado y se ha asesorado, preguntando por ejemplo a Luis Sorando, para confirmar que lo que ponía era correcto. Al final lo que sale es un producto que lo vamos a ver, que lo vamos a disfrutar nosotros, y que es ¡ZARAGOZA NO SE RINDE! , que cuenta el Segundo Sitio, sin duda alguna, mucho más emocionante que el primero.
Ocurren muchísimas cosas, es más dramático y además lo ha realizado con una gran calidad.
Hay una cosa que me parece muy graciosa y es que copia los grabados conocidos de Los Sitios, en su estilo, y luego vemos esos grabados traducidos a cómics, y esto es un guiño muy simpático para los que conocemos Los Sitios y vemos esos grabados traducidos a cómics.
Y también es un guiño para los que no conocen el tema de Los Sitios y lo conocerán por primera vez en el cómic, pero luego, más adelante, si profundizan en el tema lo van a ver el grabado original y se van a sorprender de cómo han conocido la historia. Al final, es un libro que cuenta muchas historias y que estoy seguro que muchas de esas historias nunca habían sido ilustradas, y eso también me gusta mucho, porque cuando hacemos visitas guiadas a otros sitios, cuando hacemos charlas, muchas veces contamos muchas historias que nunca han tenido una ilustración. Ahora por fin, muchos de esos episodios tienen una ilustración y eso me satisface mucho. Creo que todos, jóvenes y mayores, vamos a poder disfrutar de este libro, que todos vamos a aprender cosas nuevas. Enhorabuena Javier, te reitero mi felicitación por este libro y espero que tengas un éxito todavía mayor que en el anterior.
Tomó la palabra Luis Sorando, Presidente de la Asociación Cultural de Recreación Histórica Voluntarios de Aragón, y esto fue lo que dijo: Para mi es un placer estar aquí presentando este largo y arduo trabajo de nuestro amigo Javier Rubio, al que conocí hace unos ocho años. Diré que he recopilado un poco el proceso que he conocido del mismo. Recuerdo que un día estaba en mi almacén, allí trabajando, y apareció este señor, al que entonces tenía visto pero no nos conocíamos mucho, comentándome que le habían dicho que yo era muy friki, que me gustaban estas cosas, y que si le podía ayudar con algo de asesoría para hacer un cómic de Los Sitios. Sinceramente no le hice mucho caso porque había conocido un cómic que había hasta hace poco sobre Agustina de Aragón, que se quedaba medio cómica en bikini, y unas cosas muy marcianas, y no tenía mucha fe en un cómic de Los Sitios.
Pero es que, al cabo de dos meses, se me presentó con una carpeta, con unos dibujos que me asombraron. Había conseguido hacer un montón de láminas de las que conocíamos de Los Sitios, transformándolas, y los personajes estaban bastante bien.
Le dije varias correcciones, que pensaba que se volatilizarían, pero en dos días las trajo corregidas. Al cabo de un cierto tiempo me trajo la versión definitiva, que me gustó mucho, la verdad es que si. Pero yo pensé, este hombre ha cogido el Primer Sitio, que es del que hay más libros. Como fue una victoria española se hizo mucha propaganda, y se hicieron grabados. Entre el Primero y Segundo Sitio vino hasta Goya, y también Gálvez y Brambila. Todas las láminas creíbles de Los Sitios son del Primer Sitio. Vendió muchos ejemplares del libro, en color, porque era muy tenaz y me alegré mucho de que la cosa triunfara.
Pero cuando vino y me dijo “voy a hacer el Segundo Sitio” le dije, anda, anda, pero si del Segundo Sitio no hay imágenes para copiarlas, es mucho más complicado, la gente ya te ha comprado el Primer Sitio y esto será una cosa repetitiva. ¡Hay amigo!, ahí estuvo lo bueno. Como no había tanto grabado, empezó con planos, informándose y tal, a recrear escenas de las que no había ninguna referencia, pero las hacía creíbles porque se asesoraba bien, no sólo por mi. En el Primer Sitio se apoyó mucho pero en el segundo él ya había cogido marcha y ya sabía investigar, de por libre, bastante.
Así pues, estuvimos en el Pilar, vimos el ojo del canal, muchos sitios que no había dibujado nadie y de los cuales no había ninguna imagen, pero que sabiendo interpretar planos y con buena voluntad, se podían recrear. Contra mi pronóstico, el libro fue engordando, engordando, tuvo un gran empuje, y los uniformes eran cada vez más meticulosos y, para sorpresa mía, ya no le tenía que decir nada porque ya los había mirado él. Creo que es un gran trabajo, muy tenaz, que le ha llevado mucho tiempo, con pandemia de por medio.
Realmente, en la última versión yo no le he visto fallos. Estoy pensando en detalles como por ejemplo, discusiones en cómo mataron a Sangenís, si la bala le dio en la cabeza, si le dio en el pecho, nos pasamos con eso una semana. Luego resulta que el ojo del canal, para los que no estén muy puestos en el Canal Imperial, les cuento. El canal hace de muralla por la zona de Casablanca, y había que cruzarlo por encima, tender un puente, para poder pasar las tropas.
Pero los franceses se dieron cuenta de que había un paso de ganado por debajo del canal, donde luego estuvo la Quinta Julieta, en el barranco de la muerte, y por ese agujero se colaron. Entonces, yo creo que a Javier le daba apuro estar pidiéndome tantas cosas y lo dibujó, e hizo una hoja entera con el ojo del canal, y resulta que se equivocó de ojo del canal, porque se ve que Luceni o por ahí debe de haber algún otro ojo parecido y no era este. El caso es que era en color, precioso, y le dije “mira déjalo, no se va a enterar nadie”, pero él dijo no, no. Rehízo la lámina entera, le quedó muy creíble y yo me quito el sombrero porque otro me hubiera mandado a hacer puñetas. Recuerdo que dibujó a Napoleón entrando en España, rodeado de simples soldados, cuando en realidad iba siempre escoltado por la Guardia Imperial.
Espero que disfruten mucho con él porque la verdad es que es un cómic para los chicos, pero seamos sinceros, para todo el mundo, porque es que está muy completo, con muñequitos que cuentan muchas historias que la mayoría de la gente no conoce. Y los niños, ojalá, ojalá, lo asuman y sepan lo que es el espíritu de estas cosas. La experiencia que tenemos de ir a colegios, que hemos ido bastantes veces, es que a los chicos si se les cuentan cosas les gustan y se les quedan.
A continuación tomó la palabra el autor de la obra, Javier Rubio, y estas son algunas de las cosas que dijo: Muchas gracias a los tres, tanto a Alejandro, como a Gonzalo y a Luis, los tres me han ayudado mucho durante este tiempo y ahora me toca a mí explicaros lo que ha pasado.
Hace cinco años dejamos a Napoleón muy cabreado porque tuvo que irse de Zaragoza sin haber conseguido lo que pretendía, que era entrar en Zaragoza como si fuera una marcha militar. De hecho, el 15 de junio, cuando se acercaron las tropas francesas a Zaragoza, los generales que traían los presos les dijeron a lo presos, “¡ir al Pilar y decirles que preparen un Tedeum para mañana, por ser el Corpus, que vamos a entrar desfilando!”. Es decir, creían que iban a entrar desfilando y tuvieron que retirarse a lamer sus heridas a los montes de Juslibol. Napoleón se quedó con las ganas de haber invadido Zaragoza.
Cuando yo acabé el primer libro, Luis me dijo “no te metas con el segundo libro porque el Segundo Sitio son todo bombardeos, incendios, muertos, el tifus, nada, no hay nada que contar”. Pero yo vi que el primer libro había tenido muy buena aceptación, había que firmar muchos ejemplares, a la gente le gustaba y eso llevó a que el libro se mantuvo como número uno en ventas durante mucho tiempo. Total que, como eso fue así, dije voy a ver qué pasa en el segundo. Entonces empecé a documentarme y ya pude hacer un pequeño anticipo de lo que pasó.
Napoleón mandó a las tropas de élite, no como en el Primer Sitio. Mandó gente que había traído de Alemania, que eran tropas muy experimentadas, las mandó a Zaragoza y lo primero que hicieron fue rodearla. Antes de eso, tanto Palafox como Sangenís, que era el que le asesoraba en temas de defensa en el Primer Sitio, sabían que posiblemente los franceses iban a volver. Sangenís protegió la Rabal, protegió la zona de conventos y puso un reducto, el reducto del Pilar, que ya hablaremos de él. Pero pasó que los franceses venían dispuestos a entrar en Zaragoza.
Esta requetecalaña alrededor de Zaragoza lo que hicieron fue trincheras en zigzag, que las hacían por la noche, a cubierto para evitar que les pudiesen disparar desde la ciudad. Luego las hacían paralelas a la ciudad, cada vez más próximas y desde allí comenzaban a disparar. El resumen del Segundo Sitio fue lo que comentaba Luis, bombardeos, incendios, tifus, y al final capitularon.
Mientras Javier Rubio nos deleitaba con su presentación escuchábamos fragmentos de la conocidísima pieza musical Los Sitios de Zaragoza, obra de Cristóbal Oudrid.
La primera parte de los grabados eran grabados de artistas que reflejaban lo que había ocurrido, hubo mucha gente que pintó. Antes era muy difícil encontrar grabados, pero ahora la verdad es que si buscas en Internet encuentras muchas cosas. He querido reflejar el tifus con láminas de Goya de los desastres de la guerra. Zaragoza no tuvo más remedio que capitular, capitular que no rendirse, porque no es lo mismo rendirse que capitular. Rendirse es una rendición incondicional, pero capitular es una negociación, con unos apartados escritos, que fue como acabó Zaragoza, aunque luego los franceses no los respetaron, como veremos luego.
Una vez que tenía, más o menos, lo que había pasado en el Segundo Sitio dije, me voy a documentar, y para documentarme, además de los casi 300 libros y folletos que consulté en el Primer Sitio, que ya tenía estudiados, me documenté sobre todo en una trilogía que ha escrito un socio de la asociación. La trilogía se llama “La nación en armas”, ha sido Premio Literario de Los Sitios en 2017,2018 y 2019, y es una obra de José Antonio Pérez Francés, que está aquí presente y que me ha ayudado mucho; también me documenté con el Diario de Los Sitios, de Faustino Casamayor, que era el Secretario del Ayuntamiento de Zaragoza y escribía cada día lo que ocurría en la ciudad, con lo cual más fiable que los diarios del Secretario de la ciudad no hay nada; y sobre todo, sobre todas las cosas, me documenté con un libro maravilloso, que está descatalogado totalmente. Se titula Los Sitios de Zaragoza 18081809, “guerra a muerte”, y es obra de Raymond Rudorff. El que tenga ocasión de localizarlo en algún librero de viejo, que lo lea porque merece la pena. El libro es una mezcla entre la intención y la realidad, Habla de personajes reales pero todo el ambiente de Los Sitios lo refleja maravillosamente. Con esos libros ya en mi poder empecé a dibujar las primeras ilustraciones, y a dibujar los primeros capítulos, dibujos de todo tipo, sobre la ciudad, el Tío Mariano Lucas…
Cuando llegué a estos bocetos apareció el Covid, pero afortunadamente tenemos buenos médicos y buenos sanitarios que no cejan y, aunque no desapareció la pandemia, mejoró mucho y yo continué trabajando. Estaba tan obsesionado con el libro que cada cosa que veía me hacía pensar en Los Sitios.
Llegados a este punto escuchamos una bonita jota interpretada por el Grupo Puente de Piedra, integrado por Yoli Hernández (cantante), Félix Otero (laud), y Luis Manzano (guitarra).
A lo largo de su exposición, Javier Rubio nos informó acerca de sus procedimientos y tácticas con las que ha trabajado en la elaboración de la obra, confesando que en algún momento estuvo a punto de abandonarla debido a su complejidad y exigencia.
Afortunadamente para nosotros, no lo hizo y hoy podemos disfrutar de este magnífico libro-cómic ZARAGOZA NO SE RINDE en el que el autor nos cuenta de forma amena y entretenida, manteniendo el rigor histórico, muchos de los hechos más relevantes acontecidos durante Los Sitios de Zaragoza, como puedan ser, entre otros, los siguientes: la esforzada labor humanitaria del padre Juan Bonal y las Hermanas de la Caridad de Santa Ana, y el importante papel del hospital de Convalecientes y del convento de San Ildefonso; los feroces combates librados en el barranco de la muerte y los furiosos ataques franceses contra el barrio del Rabal, donde se registró el heroico episodio de la defensa de la puerta del convento de Altabás,
La heroica actuación de Manuela Sancho, joven de 24 años que se distinguió en la defensa del convento de San José, disparando con cañón y fusil, hasta que fue herida gravemente y dada por muerta; los combates en el reducto del Pilar, bombardeado desde cuatro de sus baterías más próximas, donde la situación iba siendo cada vez más desesperada y, a las ocho de la tarde del 15 de enero, el último tramo de los muros del reducto quedó arrasado.
Pero no solamente nos ilustra Javier Rubio en su libro grandes hechos o acontecimientos importantes de la historia del Segundo Sitio de Zaragoza, sino que también acogen sus páginas alguno de esos hechos que escriben la historia con minúsculos pero que están llenos de atractivo. Vean la singular historia del perro espía: al estar la ciudad completamente sitiada, se buscaban alternativas creativas para tratar de conseguir información de lo que pasaba en el exterior. Entre los sitiados se encontraba un contrabandista de los Pirineos, llamado Julián Pérez, que tenía un perro llamado Mira.
Aprovechando que el perro estaba adiestrado para hacer contrabando lo utilizaron para enviar y conseguir informes del exterior de Zaragoza para Palafox. Los mensajes los cosían a un trozo de piel parecida a la del perro, la colocaban disimulada alrededor de su cuello y lo mandaban al domicilio de Julián Pérez en Barbastro. El fiel animal pasaba por delante de los centinelas franceses sin llamar la atención y corría sin cesar hasta llegar a su casa en Barbastro. Al recibir el mensaje, la mujer de Julián informaba a las tropas allí concentradas y estas preparaban otro mensaje con información importante sobre los movimientos franceses en las proximidades. El perro realizó varios viajes hasta que, finalmente, los centinelas sospecharon y dispararon sobre él hiriéndole en una pata, lo que supuso el final de sus aventuras como espía.
Con esta bonita historia del perro espía, damos por finalizada nuestra crónica sobre la presentación del libro-comic ¡ZARAGOZA NO SE RINDE!, obra de Javier Rubio, que nos llevamos a casa junto con una preciosa lámina ilustrada obsequio del autor para quienes adquirimos el libro el día de su presentación.
