El pasado día 8 de junio de 2018 tuvimos oportunidad de asistir, en la capital aragonesa, a uno de los actos militares que gozan de mayor aceptación entre la ciudadanía y que representan una perfecta fusión entre las Fuerzas Armadas y la población civil. Nos referimos a la Retreta Militar por las calles céntricas de la ciudad, un pasacalles musical que viene celebrándose desde hace varios años, con gran éxito de convocatoria, organizado por el Ejército de Tierra y más concretamente por la Comandancia Militar de Zaragoza y Teruel.
Recordemos que la retreta es un toque de ordenanza que fue regulado durante el reinado de Felipe V, y posteriormente por Carlos III, que se tocaba en calles y plazas, al atardecer, e indicaba a las tropas sin servicio que había llegado el momento de retirarse a sus cuarteles.
En la actualidad se toca en los acuartelamientos y ha quedado como pieza para celebraciones, como la de este 8 de junio, en el que los ejércitos han querido manifestar una vez más su permanente compromiso de servicio a España y su agradecimiento a la sociedad, de la que forman parte y a la que sirven, por el afecto y apoyo que de ella reciben.
En esta ocasión intervinieron las Bandas de Guerra de la Brigada Aragón I, que partió de la plaza Sinués Urbiola (teatro Principal); Regimiento de Pontoneros nº 12, que salió de la plaza de los Sitios; Agrupación de Apoyo Logístico nº 41, que inició su recorrido desde el barrio de San Gregorio, y la Unidad de Música de la Academia General Militar, que lo hizo desde el palacio de la antigua Capitanía General de Aragón.
Todas ellas, desde sus diferentes puntos de partida, realizaron un pasacalles musical por diversos puntos del casco histórico de la ciudad, interpretando conocidas marchas militares, siendo aplaudidas a su paso en numerosas ocasiones.
Durante su recorrido les acompañaron los Voluntarios de Zaragoza, que un año más han estado presentes colaborando en este popular acto militar, informando al público sobre detalles de su celebración y repartiendo pequeños lazos, para prender en el pecho, con los colores de la Bandera de España.
Algo más allá de las 20.00 horas confluimos todos, Bandas de Guerra, Unidad de Música AGM, Voluntarios de Zaragoza y quienes les acompañábamos, en la plaza del Pilar donde tuvo lugar el acto solemne de la jornada, presidido por el Comandante Militar de Zaragoza y Teruel, y Director de la Academia General Militar de Zaragoza, GB. Carlos Jesús Melero Claudio.
Las Bandas de Guerra de la Brigada Aragón I, Regimiento de Pontoneros nº 12, Agrupación de Apoyo Logístico nº 41, y la Unidad de Música de la Academia General Militar habían ocupado su puesto en formación así como una sección con los portaguiones de las Unidades del Ejército de Tierra, Unidad Militar de Emergencias, Centro Militar de Cría Caballar, y de la Jefatura de la 8ª Zona de la Guardia Civil, y Agrupación de Rural de Seguridad 5 de la GC , ubicadas en Zaragoza y representadas en el acto.
Asistieron, entre otras, las siguientes autoridades militares: Jefe de la Brigada Logística, GB. Oscar Lamsfus Galguera; Jefe de la Base Aérea de Zaragoza, GB. Antonio Francisco Nebot Más; jefe de la Academia de Logística de Calatayud, GB. Eloy Celma Maquieria; Delegado de Defensa en Aragón, Coronel Félix Allo Flores, y los coroneles jefes de unidad.
Las principales autoridades civiles que asistieron al acto fueron las siguientes: Delegado del Gobierno en Aragón, Gustavo Alcalde Sánchez; Subdelegado del Gobierno en Zaragoza, Ángel Val Pradilla; Presidente de la Audiencia Provincial de Zaragoza, Julio Arenere Bayo; Vicepresidente de la Diputación Provincial de Zaragoza, Martín Llanas Gaspar; Jefe Superior de Policía en Aragón, José Ángel González Jiménez, y el Concejal del Partido Popular Enrique Collados Mateo.
Igualmente, como en tantos otros actos militares, estuvieron representadas numerosas corporaciones, asociaciones y hermandades vinculadas con las Fuerzas Armadas, entre ellas las siguientes: Real Maestranza de Caballería de Zaragoza, Asociación Cultural Los Sitios de Zaragoza, Hermandad Provincial de Antiguos Caballeros Legionarios de Zaragoza, Asociación de Militares y Guardias Civiles con Discapacidad ACIME, Agrupación Renovados Tercios Españoles, Asociación ARES de Reservistas Españoles, Asociación de Ex alumnos de los Colegios de la Guardia Civil POLILLAS, Asociación Española de Soldados Veteranos de Montaña, y Asociación de Veteranos Paracaidistas.
Los Reales Tercios de España estuvieron representados por su vicepresidente nacional José Miguel Ivars Ferrer, y por Manuel Grao Rivas, jefe de Relaciones Institucionales del V Tercio “General Aranda”.
Como relator del evento actuó el periodista de Aragón Radio, Lorenzo del Río, que nos informó a lo largo de todo el acto con documentadas explicaciones acerca del mismo.
Las tres Unidades representadas por las Bandas de Guerra estuvieron ubicadas en Zaragoza desde sus inicios. La Brigada Aragón I, se presentó en 2016 pero su historial se remonta al siglo XVI. El Regimiento de Pontoneros y Especialidades de Ingenieros nº 12 desde 1896, aunque las Unidades de Ingenieros ya tomaron parte activa en el asedio de Zaragoza en el año 1808, y han colaborado desde entonces en innumerables actividades de ayuda a la ciudad.
La Agrupación de Apoyo Logístico, que acaba de cumplir 32 años, desde sus inicios ha estado cumpliendo sus cometidos en la ciudad de Zaragoza.
Los Guiones, que rendían homenaje a todos los ciudadanos, militares y civiles, en este acto escenificado en la Plaza del Pilar, representaban a las siguientes unidades: Academia General Militar, Brigada Aragón I, Brigada Logística, Centro de Adiestramiento San Gregorio, Agrupación de Sanidad nº 3, Regimiento de Caballería España 11, Regimiento de Pontoneros y Especialidades de Ingenieros nº 12, Zona de la Guardia Civil de Aragón, Agrupación Rural de Seguridad nº 5 de la GC (ARS), Batallón de Intervención en Emergencias nº 4, y Centro de Cría Caballar de Zaragoza. A las 20.30 horas hizo su llegada a la plaza del Pilar el Comandante Militar de Zaragoza y Teruel, Carlos Jesús Melero Claudio, que fue recibido con los honores reglamentarios.
Seguidamente saludó a todos los presentes y pasó a ocupar la presidencia del acto.
El relator dio lectura del siguiente texto: “El Ejército de Tierra quiere hoy conmemorar el 125 Aniversario de la construcción y entrega del edificio de la Capitanía General de Aragón.
La figura del Capitán General es introducida en España por el Rey Felipe V, primer monarca de la dinastía Borbón, en el año 1711. Zaragoza era la única Plaza cuya Capitanía no tenía edificio propio y, tras ser ubicada en diferentes edificios emblemáticos de la ciudad, es tras la celebración de la Exposición Agrícola e Industrial del año 1868 cuyos terrenos se pusieron a la venta, cuando entonces se adquiere el solar donde actualmente se asienta la Capitanía, y en el año 1879 se inicia la construcción del mismo”.
Seguidamente, la Unidad de Música de la AGM y las Bandas de Guerra interpretaron, con gran deleite del numeroso público asistente, las siguientes piezas: Badajoz, Los Generales, Las Corsarias.
Se llevó a cabo el acto de Homenaje a los Caídos, dando lectura previa al soneto de rigor, que se inicia con las siguientes palabras: “Lo demandó el honor y obedecieron, lo requirió el deber y lo acataron, con su sangre la empresa rubricaron, con su esfuerzo la Patria engrandecieron…
Los portaguiones y portacoronas avanzaron a paso lento hacia el monolito de homenaje a la vez que, simultáneamente, se cantaba la parte central de la oración cristiana “La muerte no es el final”, obra del sacerdote español Cesáreo Gabarain Azurmendi.
El Comandante Militar de Zaragoza y Teruel y el Delegado del Gobierno de España en Aragón depositaron una corona de laurel a los pies del monolito que recuerda a los que, en paz o en guerra, dieron su vida por España.
El R.V. Miguel Ángel Melguizo, capellán castrense, con consideración de capitán, de la Academia General Militar, rezó la siguiente oración: “Que el Señor de la vida y la esperanza, fuente de salvación y paz eterna, les otorgue la vida que no acaba, en felíz recompensa por su entrega. Que así sea“.
Se interpretó el toque de oración y, llegados al punto ejecutivo, saludamos con respeto y admiración a quienes nos precedieron en el servicio a España. Coincidiendo con su último acorde se disparó una salva de honor de fusilería.
Durante todo el acto de la Retreta Militar, las bandas de guerra y la Unidad de Música de la AGM interpretaron, además de las piezas que ya hemos referido, las siguientes composiciones: Retreta, Los voluntarios, Bailén, Aires de paz, La orgía dorada, Batallón y llamada, Marcha de los infantes.
Al igual que lo hemos hecho en otras ocasiones, quisimos conocer la opinión de algunas de las muchas personas, que nos acompañaban este día en la plaza del Pilar de Zaragoza, sobre el acto de la Retreta Militar y para ello les preguntamos básicamente qué les parecía el acto en sí, qué sentían al participar en el mismo y si consideraban que este y otro tipo de actos militares similares deberían celebrarse con mayor frecuencia en las calles de la capital para disfrute de la ciudadanía.
Hemos de decir que las respuestas fueron unánimes. Todos, damas y caballeros, manifestaban sentirse orgullosos de ser españoles y participar de estas fiestas de españolidad que representaban los actos militares, sobre todo en los tiempos que nos toca vivir actualmente; el acto les parecía también a todos muy bonito, y consideraban que deberíamos tener más oportunidades de asistir a estos eventos militares en la vía pública.
No todas las preguntas las hicimos nosotros, algunas personas allí presentes nos preguntaron que donde estaba el alcalde, y la verdad es que no supimos responderles.
Desde estas sencillas líneas de los Reales Tercios de España queremos felicitar al COMIL GB. Carlos Jesús Melero Claudio, por dar continuidad a este bello acto que es la Retreta Militar, y por el esfuerzo realizado por todo el personal de la Comandancia Militar de Zaragoza y Teruel volcados en la impecable organización del mismo. A la Oficina de Comunicación le expresamos nuestra gratitud por todas las facilidades que nos ha dado para la confección del presente trabajo.
Fotografía: MGR y COMIL